11.5 C
Xalapa
lunes, diciembre 23, 2024

Alarma mundial por el iceberg más grande del mundo se puso en movimiento: “Impacto en el ecosistema”

El iceberg más grande del mundo se puso en movimiento tras estar 3 décadas anclado en el océano antártico.

El iceberg A23a, considerado el más grande del mundo, con una superficie de 4000 km² (unas veinte veces el tamaño de la Ciudad de Buenos Aires) y un espesor de 400 metros, que se formó en 1986 al desprenderse de la plataforma de hielo Filchner, se encuentra nuevamente en movimiento tras pasar más de tres décadas anclado en el fondo del mar de Weddell, en la Antártida.

El iceberg más grande del mundo está en movimiento y se prendió una alerta mundial

Después de separarse de la costa antártica, el A23a quedó atrapado en el lecho marino hasta 2020, cuando comenzó a desplazarse lentamente. Sin embargo, su avance se detuvo este año debido a un fenómeno conocido como Columna de Taylor, un efecto natural que lo mantuvo girando sobre sí mismo durante meses.

Ahora, el iceberg logró liberarse de este fenómeno y continúa su trayecto hacia el norte. Según expertos del British Antarctic Survey (BAS), este desplazamiento podría tener un impacto significativo en el ecosistema de la región.

El impacto ambiental provocado por el movimiento del iceberg más grande del mundo

“Es emocionante ver a A23a en movimiento nuevamente después de períodos en los que estuvo estancado. Nos interesa ver si seguirá la misma ruta que otros grandes icebergs que se desprendieron de la Antártida. Y lo más importante, qué impacto tendrá esto en el ecosistema local”, explicó el profesor Andrew Meijers, oceanógrafo del BAS.

Se prevé que el iceberg más grande del mundo siga la Corriente Circumpolar Antártica hacia el Océano Austral, lo que podría llevarlo cerca de las islas Georgias del Sur, un territorio cuya soberanía es disputada entre Argentina y Reino Unido.

Al alcanzar estas aguas más cálidas, los expertos estiman que el iceberg comenzará a fragmentarse en bloques más pequeños y eventualmente se derretirá por completo. Este proceso de descomposición podría generar cambios en las corrientes oceánicas y afectar la biodiversidad local antes de su desaparición definitiva.

Articulos relacionados

Más recientes